El Arte de Aprender: Innovación, Reflexión y Tecnología en la Educación

El Cognitive Affective Model of Immersive Learning (CAMIL) plantea que el aprendizaje en entornos inmersivos está mediado por la presencia y la agencia, que a su vez impactan factores afectivos y cognitivos como la motivación, la autoeficacia, la regulación del aprendizaje y la carga cognitiva. Estos elementos pueden trasladarse al aprendizaje experiencial, que se basa en la interacción directa con el entorno, la reflexión y la transferencia del conocimiento.

Diagrama del Modelo CAMIL

El aprendizaje experiencial enfatiza el proceso de aprendizaje sobre el producto final (Kolb, 1984; Dewey, 1938), permitiendo que los estudiantes construyan significado a partir de la experiencia directa y la metacognición. Esta aproximación coincide con CAMIL en los siguientes aspectos:

Presencia: En el aprendizaje experiencial, la inmersión en situaciones reales o simuladas (incluyendo IVR o juegos de rol) genera un mayor sentido de conexión con el conocimiento.

Agencia: Los estudiantes toman decisiones activas en su aprendizaje, lo que fortalece la autoeficacia y la motivación.

Reflexión y Metacognición: Ambos modelos resaltan la importancia de la reflexión en el aprendizaje profundo y la transferencia del conocimiento.

La evaluación del proceso sobre el producto, como destaca Simm (2005), es crucial en el aprendizaje experiencial, ya que permite valorar:

  • El desarrollo del pensamiento crítico y la toma de decisiones.
  • La capacidad de reflexionar y corregir errores en tiempo real.
  • El impacto de la experiencia en la conceptualización y aplicación del conocimiento.
Relación entre Aprendizaje Experiencial y CAMIL
1. Aplicación de CAMIL en Aprendizaje Experiencial y Evaluación del Proceso

Basándonos en Rodríguez et al. (2024), la formación docente a través del aprendizaje experiencial demuestra que los profesores que participan en experiencias inmersivas tienen una mayor capacidad para:

  • Aplicar el conocimiento en contextos reales.

  • Desarrollar habilidades de liderazgo y resolución de problemas.

  • Reflexionar sobre su propio aprendizaje y mejorar su enseñanza.

Esto refuerza la idea de que la evaluación debe centrarse en el proceso de aprendizaje, tal como lo plantea CAMIL. En este sentido, la enseñanza no debería medirse únicamente por el resultado final, sino por la capacidad de los estudiantes para:

  • Analizar críticamente situaciones.

  • Adaptarse a nuevos escenarios.

  • Transferir conocimientos a distintos contextos.

Por otro lado, Simm (2005) plantea que la combinación del aprendizaje experiencial con metodologías de aprendizaje basado en problemas (PBL) permite evaluar de manera más efectiva el desarrollo de habilidades metacognitivas y de resolución de problemas, alineándose con la idea de CAMIL de que el aprendizaje inmersivo requiere reflexión y autoevaluación.

2. Elementos para una Evaluación del Proceso desde CAMIL y Aprendizaje Experiencial

Para trasladar estos principios a una evaluación del proceso más que del producto, se pueden utilizar estrategias como:

Diarios de Reflexión: Facilitan la autoevaluación y el monitoreo de la evolución del aprendizaje (Mezirow, 1991; Moon, 1999).

Portafolios de Aprendizaje: Recopilación de evidencias de aprendizaje que reflejan la evolución del pensamiento crítico y la autoeficacia.

Evaluación Formativa Continua: Uso de rúbricas centradas en el proceso de toma de decisiones, la capacidad de resolución de problemas y la metacognición.

Retroalimentación Basada en Reflexión: En lugar de evaluar únicamente un producto final, se evalúa el proceso mediante preguntas de reflexión y debates.

Uso de Tecnologías Inmersivas o Simulaciones: Aunque IVR no siempre es accesible, herramientas más simples como juegos de rol, debates estructurados o simulaciones pueden replicar la presencia y agencia de CAMIL.

Elementos para una Evaluación del Proceso desde CAMIL y Aprendizaje Experiencial
3. Propuesta Formativa: Hacia un Modelo de Aprendizaje Basado en CAMIL y Evaluación del Proceso

Para generar una nueva propuesta formativa basada en la integración de estos enfoques, se podría diseñar un modelo que contemple:

🔹 FASE 1: INMERSIÓN (Presencia y Agencia)

Actividades de simulación, estudios de caso o aprendizaje basado en proyectos.

Enfoque en la toma de decisiones autónoma de los estudiantes.

🔹 FASE 2: REFLEXIÓN (Evaluación del Proceso)

Uso de diarios de aprendizaje y rúbricas de evaluación formativa.

Implementación de espacios de discusión y retroalimentación.

🔹 FASE 3: GENERALIZACIÓN Y TRANSFERENCIA

Aplicación de conocimientos en nuevos contextos.

Evaluación de la capacidad de los estudiantes para integrar conocimientos y adaptarse a nuevas problemáticas.

Esta propuesta permitiría:
✅ Alinear la enseñanza con el desarrollo de habilidades metacognitivas y críticas.
✅ Fortalecer la autoeficacia y la regulación del aprendizaje.
✅ Fomentar el aprendizaje situado y significativo.

Propuesta Formativa: Modelo de Aprendizaje Basado en CAMIL y Evaluación del Proceso

La relación entre CAMIL, el aprendizaje experiencial y la evaluación del proceso sobre el producto es clara: todos enfatizan la reflexión, la agencia y la presencia en el aprendizaje. En tiempos de IA, estos enfoques ofrecen una alternativa a la enseñanza tradicional, promoviendo un aprendizaje más profundo y adaptable a contextos complejos.

Sin embargo, el valor de estas metodologías no depende exclusivamente del uso de tecnologías avanzadas como la realidad virtual. Los hallazgos sobre presencia y agencia pueden trasladarse a herramientas más accesibles, incluso analógicas, siempre que el diseño de experiencias de aprendizaje contemple conscientemente estos principios. Un juego de cartas didáctico, por ejemplo, puede posicionar al estudiante en un rol activo, desencadenando experiencias de aprendizaje significativas que fomenten la toma de decisiones y la reflexión. Este principio se encuentra reflejado en el artículo Aprendizaje basado en simulaciones ¿Brain Hacking?, que resalta cómo la intencionalidad en el diseño educativo puede generar inmersión y aprendizaje profundo sin depender de tecnología de alto costo. Asimismo, el libro Proyectos de Innovación Educativa con Realidad Aumentada ofrece ejemplos concretos de cómo la realidad aumentada ha sido implementada en entornos de bajo presupuesto, demostrando que la creatividad pedagógica-andragógica, es clave para ampliar las oportunidades de aprendizaje. Además, estudios recientes como el de Fiorella y Mayer (2021) (Springer) destacan cómo la combinación de aprendizaje activo y tecnologías inmersivas pueden mejorar significativamente la comprensión y retención del conocimiento, alineándose con los principios fundamentales de CAMIL y el aprendizaje experiencial, reforzando que el diseño intencional de experiencias puede ser la clave, más allá de la sofisticación tecnológica disponible.

Libro: Proyectos de Investigacion Educativa con Realidad Aumentada | Ruth Toro
Referencias Clave para Sustentar la Relación

Kolb, D. A. (1984). Experiential Learning: Experience as the Source of Learning and Development.

Dewey, J. (1938). Experience and Education.

Mezirow, Jack Transformative Dimensions of Adult Learning.

Rodríguez et al. (2024). Uso de aprendizaje experiencial en formación docente y evaluación del proceso.

Simm, D. (2005). Experiential learning: assessing process and product

Fiorella, L., & Mayer, R. E. (2021). The science of learning and development: Educational psychology meets the learning sciences. Educational Psychology Review, 33(1), 1-22. https://link.springer.com/article/10.1007/s10648-020-09586-2

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