Este lunes 16 de enero se presentó en el contexto del 9º Congreso Internacional de Innovación Educativa, en el Tecnológico de Monterrey, México. Esta es la tercera oportunidad en la que logramos participar en este congreso, ya lo hicimos en la versión 2019, presentando los avances iniciales de lo que fue la Estrategia triestamental en competencias digitales que se desarrolló en la Universidad de Playa Ancha. Con la ponencia que se denominó “Fundamentos y diseño de un ecosistema digital de apoyo a la docencia”, el año 2021, participamos con el libro “Experiencias de Innovación Digital en Espacios Educativos”, libro que se incorpora experiencias de innovación en confinamiento. Y este año tuvimos la oportunidad de participar con el libro “Proyectos de Innovación Educativa con Realidad Aumentada”, proyecto realizado de forma conjunta entre la Unidad de Innovación Digital de la Upla, Chile y la Universidad Tecnológica de Oteima, Panamá.
Este libro es una recopilación de proyectos educativos desarrollados en ambas instituciones, que buscan utilizar la Realidad Aumentada como una herramienta para mejorar la experiencia de aprendizaje de los estudiantes. En estos proyectos se abordan temas como el desarrollo de habilidades digitales, la creatividad y la colaboración en el aula, entre otros. El objetivo de este libro es compartir las experiencias y lecciones aprendidas en el desarrollo de estos proyectos, con el fin de inspirar a otros docentes y educadores a adoptar la Realidad Aumentada en sus propios espacios educativos.
Es importante desmitificar que las herramientas para desarrollar realidad aumentada sean inaccesibles, hoy es posible utilizar la realidad aumentada con un presupuesto limitado para ayudar en el aprendizaje de comunidades de alta vulnerabilidad. Existen varias herramientas y aplicaciones gratuitas o de bajo costo que se pueden utilizar para crear contenido de realidad aumentada, como Aurasma, HP Reveal o AR Flashcards. Además, se pueden utilizar dispositivos móviles ya disponibles en la comunidad, como smartphones o tablets, en lugar de tener que adquirir dispositivos especializados. También se pueden utilizar recursos disponibles en la comunidad, como objetos del día a día o imágenes impresas, para crear experiencias de realidad aumentada. Es importante destacar que la realidad aumentada no solo es una herramienta tecnológica, sino una pedagógica que permite una mayor interacción y motivación de los estudiantes, es por ello que se ha demostrado una excelente alternativa para mejorar el aprendizaje de comunidades vulnerables.